En una casa de algún vecindario de Buenos Aires vivía una chica como cualquier otra pero esta tenia algo en especial, cada ves que alguien la iba a visitar jamás volvían, nadie sabia porque.
Un día un chico llamado Roberto salió a comprar al negocio de la esquina, y se pillo con la hija de la familia ya mencionada, a Roberto le gusto mucho y la quería volver a ver, así que fue a su casa a pedir una taza de azúcar pensando que la chica lo atendería y así fue la chica lo invito a pasar y le dijo que tomara asiento el chico se sentó pero quedo solo ya que la hermosa chica fue a buscar la taza de azúcar.
La chica no volvía y el chico sin pensarlo fue tras ella, al no encontrarla empezó a registrar las habitaciones hasta que llego a la cocina, el chico entro y fue asesinado velozmente por la chica que le enterró un cuchillo en la espalda, el chico cayo en el suave piso de la casa y la chica lo empezó a arrastra hasta llevarlo a un matadero que tenia, ahí lo metió a un horno y se deceso de el.
Nadie nunca más supo del chico, pasaron 9 meses y 15 chicos de ese mismo vecindario murieron por la misma causa.
Esta fue la historia de una chica sicópata que le encetaba asesinar a los chicos que quedaban locos al verla.Fabian Altamirano.